La sexualidad del chongo III

En ésta entrega me he propuesto profundizar y cerrar algunos de los conceptos trabajados anteriormente y proponer algunas otras cuestiones a tener en cuenta.
Retomaremos el concepto de mujer con el fin de delimitar el rango que abarca esta categoría:
Habíamos dicho que ser mujer es una cuestión biólogica combinada con una demarcación social (cumpliendo la función de asegurar la reproducción y continuidad de la especie, así como también de proporcionar placer y comodidad a los hombres).
Nuestra querida CHeVDD ha señalado muy brillantemente que la cuestión del deseo debe ser analizada en nuestro desarrollo. Pues bien, en principio, habría que preguntarse:
Es que la mujer tiene acceso al libre deseo? Tiene derecho a desear con independencia de los deseos que una mujer debe tener?
Es decir, es una mujer capaz de desear algo por fuera de las funciones pre-establecidas? Y, si lo es, importa? O tiene un estéril derecho a desear?
Por último, el deseo de la mujer que cumple con heteronormatividad, es un deseo libre? Es legítimo? Es genuino? Es realmente un deseo? O es que acaso es un deseo inculcado? Y respecto de los motores de la chonguez, responden a un deseo o a un contradeseo, no necesariamente fundamentado en el ser sino en el no-ser?
Por otro lado me he propuesto incluír el planteo de Madeleine acerca de los roles de dominio.
Es la mujer siempre dominada? O tambien domina? Hay matices?
Si bien hace varias décadas que se proclama publicitariamente que la mujer ha recuperado la autonomía. Mientras la mujer parece haberse procurado su entidad como sujeto dueño de sí mismo (sólo en funcion de las necesidades de consumo), sin abandonar el esclavismo incorpora felizmente el disfraz de mujer contemporánea. Fundamentando su felicidad en cierta mitología de la igualdad. Nuestra mujer fuerte no deja de ser la sombra y el sosten de una sociedad estructuralmente machista. Es entonces la mujer libre de ir tras sus propios deseos o va tras los propios deseos dentro de un marco que delimita la voluntad entre ciertos márgenes difusos (y en tanto difusos, mucho más difíciles de cuestionar)? Es posible que la mujer domine igual que el hombre? O existe una manera femenina de dominio? Es posible una relación de igualdad sin lucha de poder entre una mujer y un hombre?
Dejamos planteadas estas preguntas sobre la mujer y continuamos con el analisis del chongo.
Es acaso posible entonces que no haya una relación de dominio entre una mujer y un hombre? Dos mujeres? Entre dos chongos? Entre un chongo y una mujer? Es un chongo, un ser que goza del libredesear? O está atado a una nueva demarcación que lo cerca por fuera del campo de acción de una mujer? Está el chongo enclosetado para el otro lado?
Por último, plantearé una nueva desfragmentación chongueril:

Analicemos por un momento la cuestión biológica del chongo. Como se ha sostenido en el pasado, la cuestión social del chongo está acompañada por una serie de diferencias a nivel biológico: y en esto entra en juego la cuestión hormonal. Las hormonas definen muchisímas características anatómicas y ademas de cuestiones relativas al carácter del sujeto. Será entonces que la estructura psicológica modifica la actividad hormonal, o viceversa?
Supongamos que el Chongo nace de la reacción y el cuestionamiento a la pautas sociales heredadas; que el origen del chongo parte de una revolución contra las limitaciones impuestas por tradición, y que lo psicológico influye en lo hormonal.
Pero estamos en condiciones de dar por verdadero el factor de una reaccion contra la opresión como el nacimiento del chongo?
Creo que en este punto debemos recurrir a una nueva desfragmentación. No todos los chongos son iguales, hay que subcategorizar a los chongos. Tenemos por un lado, al chongo old school y por el otro al chongo new age. Entre una y otra categoría se da una tercera que podríamos llamar, chongo trnsitioning que agrupa algunas cuestiones del old school incorporando características New Age.
El chongo old school es el chongo subersivo, aquel que ha adoptado la chonguez a pesar de los contratiempos y dificultades que acarrea la rebelión anti-género.
El chongo New Age es el que surge a partir del momento en que ser chongo tiene onda. Es lo que consideramos un falso chongo: El brillante ataque de la estructura capitalista, convertir la imagen del chongo en un producto de moda ha sido una manera de borrarnos. De incorporarnos haciendonos un lugar dentro de una institucionalidad de la que renegamos.
El chongo transition es aquel que nace como protesta al modelo heteronormativo en un momento de legitimidad de la chonguez.
Detengamonos por un momento en el enunciado que afirma la onda de la chonguez: Ser chongo tiene onda? Todos los chongos tienen onda? O depende de la clase de chongo que seas el tener onda o no?
Para finalizar esta entrega voy a introducir un nuevo exponente que no ha sido tenido en cuenta (no es reconocido como individuo que forma parte de la especie chongueril): El chongo heterosexual. Porque que lo hay, los hay... Si ser chongo es una forma de romper con los esquemas, es deber chongueril romper con el closet homosexual, que refleja simétricamente el closet heterosexual.
Y antes de que afloren las protestas de los chongos radicales defensores del orgullo gay en tanto exlusivo de un orgullo heterosexual, quisiera aclarar que distingo al chongo heterosexual del chongo no asumido.
Si bien hay chongos homosexuales no declarados que viven cumpliendo con la heteronormatividad, también existen chongos naturalmente heterosexuales.
A la espera de comentarios, los saluda Abraxas.