Que nuestra relación descanse en paz de una vez por todas...

Corría el año 2005. Hacía 2 años había empezado a trabajar en este maravilloso semillero de tortas camufladas y chongos afiebrados que le daban vida a esta fábrica de repuestos. Una mañana como todas, apresurada y ruidosa, nos trae la noticia: -Señores, les presento a la nueva Supervisora de Control de Calidad- decía el muy homófobo de mi jefe. La presentación fue breve y en seguida volvimos a las tareas. La miré (claro que la miré estaba muy buena) bajita, pelo muuuy largo ondulado, unas gomas encarceladas en un push up muy probablemente, muy lindo culo y una alianza de oro en el dedo anular izquierdo. No miré mas. Automáticamente aniquilé cualquier tipo de fantasía que estuviese en proceso. Los días pasaban y las charlas eran muy formales, hasta incómodas diría. No insistí mucho en agradarle. Así pasó un año sin saber que existíamos aparentemente, hasta que un mediodía se acerca e interrumpe mi momento de confesión diaria con La Pato:- A mi tambien me gusta Aretha Franklin- dice mordiendose una uña.- Como sabés que me gusta Aretha Franklin?- le respondí confundida.-Nena, hace un año que te presto atención...- CHAN. Pato se había dado vuelta y me guiñaba el ojito con picardía. No pude hacer mas que sonreir y quedarme callada. Mas tarde ese mismo día aparece de nuevo:- Ce, viniste en el auto? No me llevas que mi marido no puede venir?- me preguntó como ahogada,- si, claro- le respondí sin pensar. El laburo quedaba a 20 minutos de la casa, no habló hasta estar casi a cinco cuadras:- Ce, te tengo que confesar algo. Me parece que soy "un poco" lesbiana- . Aguanté la carcajada y no sé como le respondí:- Pero que es lo que te pasa Lo?- ...- Siento que la vida se me pasa y no estoy satisfecha.- ...- Bueno Lo me parece que esto es para hablarlo largo y tendido, cuando quieras llamame no tengo drama- se bajó del auto mientras sacudía la cabeza afirmando. Los días pasaban y no tenía noticias de ella, en el trabajo ni se acercó al sector, definitivamente se había arrepentido. Domingo a la noche suena mi celular, mensaje:- Ce, querés venir a tomar algo a casa?-...- En media hora estoy ahi- respondí de toque. A correr! Me depilaba con una mano mientras me vestía con la otra (si, hay algunos chongos que se depilan solo antes de garchar). Llegué puntual como de costumbre. -Pasa y aguantame un segundo que acuesto a la nena- (WTF!?, o en criollo que carajos..."?) Si, la nena era la sobrinita que había venido a pasar el día. Aniquilé la fantasía otra vez. -Tomate una cerve que en seguida vuelvo- dijo despreocupada. La esperé. Me quedé como una idiota mirando los cordones de mis all stars como intentando descifrar algo y cuando levanto la vista tenía un hermoso par de tetas en la cara. Yo que soy lela pero no quedada me levanté y me aventuré a empujarla hasta donde creía que estaba la cama.- mmm me parece que acá no, tu sobrina esta a menos de cinco metros-...- Vamos al altillo- y fuimos al altillo. Me sorprendió su predisposición. Bajamos del altillo dos horas despues (bueno 45 minutos). La noté silenciosa y distante.- Estas bien?- le pregunté.- Si, estoy bien. Pensé que me iba a sentir mal- Me fuí sin saber muy bien que pensar pero me dije:- un polvo es un polvo-. Así pasamos el primer mes, garchando tres o cuatro veces por semana, sin complicaciones ni rayes raros. Todo lacio. Hasta que llegamos al segundo. -Sabes? Gerar (el marido) y vos son las personas mas importantes en mi vida. Me mandaste al psicólogo sabías? Me dijo que lo que tengo con vos es una relación- me contaba con voz serena.- Tranqui Lolona, nadie te exige nada- le dije sin mucha seguridad. La puta madre! Me estaba enamorando! Me entró el pánico. No sé como ni cuando pero me empecé a alejar. Pasaron 15 días, aunque me decía a mi misma que era yo la que me había alejado la realidad era que lo habiamos hecho de común acuerdo. Mensaje en el celular:- Hola Ce, estuve internada. No se que tengo pero hay algo mas...- Respuesta:- Em creo que ya se Lo- Si señoras y señoras, estaba EMBARAZADA. Y no era mío. Tres meses mas tarde fallece mi mamá.- Ce, venite a casa que te quiero hacer unos mimos-. Fui. Hago dos pasos para entrar al living y cierra la puerta detras mío. No tuve tiempo de decir nada que ya había pelado las tetas. Le puse la remera de nuevo y la abracé. Lo único que quería era tocarle la panza (torta boluda enamorada). Casi no hablamos ese día y decidí alejarme por lo bueno. Pasaron los meses, diez para ser mas precisa. Yo había conocido a alguien, estaba tranquila, contenida, segura y me permití acercarme a ella otra vez. No se le ocurrió mejor idea que invitarme a cenar para presentarme al marido. Pude haber dicho que no, pero me pudo la necesidad de compararme con el cornudo. No me fue tan mal, por lo menos recuperé el ego.
A veces fantaseo con la idea de creer que quedó embarazada el mismo día que estuvimos juntas, que algo de mí le quedó.
Despues de cuatro años puedo decir que somos muy buenas amigas y, como chongo aplicado no podía dejar de reenviarle el memo que bien cajoneado lo tenía...